Saud Abu Ramadan, agencia EFE
Asustado por la virulencia de la riada, Mohamad Entir se despertó repentinamente y corrió a la habitación de sus hijos, una de las pocas que han quedado en pie en su casa tras la devastadora ofensiva lanzada este verano por el Ejército israelí sobre Gaza.
Las primeras lluvias del otoño han llegado a la Franja de manera torrencial, sin tiempo para reparar las grietas y desperfectos que causaron los miles de proyectiles caídos durante 50 días de guerra.
Unas 100.000 viviendas quedaron dañadas tras los miles de proyectiles caídos durante 50 días de conflicto bélico con Israel.
Contenido extraido de: http://ift.tt/1r0brTb
No hay comentarios.:
Publicar un comentario