Mundo Algunos pensaban que era una niño, pero en realidad es una niña. Su nombre: Hudea. Con sus cuatro años, es una de las habitantes de un campo de refugiados de Atme, en el noreste de Siria. La fuerza de la imagen reside en que Hudea, cuando el fotógrafo Osman Sağırlı se le acercó con su cámara, la niña levantó los brazos, como si le hubiesen apuntado con un arma. La imagen se volvió viral la semana pasada, pero fue tomada en diciembre pasado en un campo de refugiados.
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